Cita con el cirujano

Rinomodelación: la nariz soñada sin bisturí

La nariz es una de las áreas del rostro que más atención recibe, cuando se trata de estética y apariencia. Uno de los objetivos más comunes es la corrección de las irregularidades de la nariz, para que luzca con un perfil ideal. Para ello uno de los procedimientos más resaltantes es la rinomodelación, ya que permite prescindir del quirófano.

¿Qué es la rinomodelación?

La rinomodelación es un procedimiento o tratamiento dentro de la medicina estética que tiene como objetivo modificar la apariencia de la nariz, sin tener que optar por la cirugía y, con ello, se eliminan riesgos y complicaciones.

Asimismo, la rinomodelación permite moldear la nariz para corregir alguna deformidad o protuberancia en la punta nasal y en el caballete. Se trata pues de una que varía en cada caso según las irregularidades que presente el paciente. Todo para lograr una apariencia armónica de la nariz con el resto del rostro, la cual es visible tanto de frente como de perfil. 

Su realización consiste en la aplicación de ácido hialurónico en zonas específicas de la nariz para lograr la línea estética deseada. Además, se trata de un cambio temporal, ya que los resultados de la rinomodelación se mantienen durante un lapso de 18 y 24 meses. En este sentido, la rinomodelación es la opción ideal para quienes no desean someterse a la intervención quirúrgica que permite hacer cambios permanentes, es decir, la rinoplastia.

¿Quién es el paciente ideal para realizarse una rinoplastia sin cirugía?

Las personas que pueden someterse a una rinomodelación son aquellas que presentan irregularidades o protuberancias leves en la nariz. Por ejemplo, personas cuya nariz tiene forma de gancho, torcida o necesita lograr mayor definición y altura. También pacientes que tienen la punta nasal con una caída entre leve y moderada y quienes hayan recibido algún golpe justo en el puente de la nariz y requieren corregirla. 

De igual manera, son candidatos ideales a la rinomodelación, quienes se han sometido a la rinoplastia u otras cirugías de nariz como la septoplastia y han tenido complicaciones. Por ejemplo, cuando el cartílago es retirado en exceso, haciendo que el puente de la nariz se hunda hacia abajo.

Ventajas y cuidados tras la rinomodelación

La rinomodelación representa un excelente conjunto de ventajas que contamos a continuación. Por ello, cada vez son más las personas que eligen el procedimiento para mejorar la estética de su nariz.  

  • Permite corregir la curva de la nariz haciendo que su contorno sea recto. También brinda la posibilidad de elevar la punta.
  • Mejora el caballete y optimiza la apariencia de la nariz, de frente y de perfil.
  • Rellena zonas de la nariz, para eliminar desviaciones e irregularidades.
  • Es un tratamiento no invasivo y no genera dolor.
  • El tiempo de realización es muy corto, toma entre 20 y 30 minutos. 
  • No requiere anestesia general.
  • No representa riesgos ni complicaciones quirúrgicas.
  • No deja ningún tipo de marca.
  • No implica un período posoperatorio o de recuperación, por lo tanto, no hace necesaria la incapacidad laboral.
  • Los resultados son inmediatos, es posible notar las correcciones una vez finaliza el procedimiento.
  • Es reversible, tras unos meses la nariz vuelve a su estado normal, ya que el organismo absorbe el ácido hialurónico de forma natural.
  • Ayuda a mejorar la apariencia y con ello la autoestima.
  • Tiene un precio más económico que la rinoplastia.

Cuidados posteriores

Los cuidados necesarios posteriores a la rinomodelación consisten en la aplicación de hielo, justo en las estructuras contiguas a la nariz. De esta forma impedimos cualquier tipo de edema o hematoma, aunque no es común que se presenten. Además, hay otros cuidados claves como:

  • Tratar de no tocar la zona tratada durante un lapso de 48 a 72 horas.
  • Evitar el uso de gafas durante una semana, esto para impedir que el relleno de ácido hialurónico aplicado se deforme o cambie de posición.
  • Evitar dormir boca abajo.
  • No hacer actividad física de gran impacto durante las 72 horas siguientes al procedimiento. Esto para garantizar que el ácido hialurónico se estabilice en su forma y posición correspondiente. En el caso de que dicho relleno se mueva, la nariz podría quedar asimétrica o con alguna deformación.
  • No consumir bebidas alcohólicas durante la primera semana posterior a la realización del procedimiento. Esto se debe a que ya que tiene efecto vasodilatador y eleva el flujo sanguíneo, lo cual contribuye a la aparición de hematomas.
  • Si se siente dolor o algún tipo de molestia, es fundamental consultar con el médico especialista, para que indique si es conveniente el uso de algún analgésico.
  • Asistir a la consulta 15 días después de la realización de la rinomodelación, para la correspondiente revisión y evolución. En el caso de que sea necesario, el médico puede infiltrar más material o ácido hialurónico para que la corrección de la nariz sea completa.

¿Cómo se usa el ácido hialurónico en la rinomodelación?

El ácido hialurónico es producido por el cuerpo naturalmente, y se encuentra en los tejidos y en mayor medida en la piel, los cartílagos y las articulaciones. En cuanto a su función, es capaz de ofrecer elasticidad, detiene el desarrollo de arrugas y la flacidez, hidrata y reduce el desgaste del cartílago.

El uso del ácido hialurónico para la rinomodelación se centra en las infiltraciones, poniendo depósitos pequeños en el dorso o la punta de la nariz. En este sentido, funciona como un excelente material de relleno, es compatible con el organismo, seguro, moldeable, ofrece ideales resultados y un buen tiempo de duración. 

Es decir, consiste en la aplicación de microinyecciones de forma directa en la piel de la nariz. Esto luego de aplicar una pomada anestésica o frío para garantizar la mayor comodidad para el paciente. Se trata de un procedimiento sumamente simple.

¿Cómo se realiza la rinomodelación?

La técnica de la rinomodelación se inicia con la revisión del paciente por parte del médico especialista. Es fundamental establecer una conversación para exponer las expectativas puestas y los objetivos a conseguir con este procedimiento. Es clave establecer cuáles son las áreas de la nariz que se deben corregir.

Seguidamente, es posible iniciar con la aplicación de la anestesia, para que todo el procedimiento resulte cómodo para el paciente. Después se realizan las infiltraciones con el ácido hialurónico, específicamente en las zonas donde es necesario, según las particularidades de cada paciente, hasta lograr las correcciones necesarias. 

Cabe destacar que las infiltraciones en la nariz, se realizan como depósito y el volumen del material varía según los requerimientos del paciente. Posteriormente, puede ser necesario hacer una compresión leve, con el objetivo de moldear el ácido hialurónico de forma manual y lograr el contorno que se desea. En algunos casos, también se puede utilizar una férula nasal durante algunos días, para evitar que dicho relleno se desplace. 

¿Se puede sustituir la rinoplastia convencional por la rinomodelación?

La rinomodelación es un tratamiento que permite hacer retoques en la nariz y corregir su apariencia, para lograr la estética ideal del rostro; es decir, resulta estupenda para realizar correcciones leves.

No obstante, no puede reemplazar la rinoplastia convencional, ya que esta sí permite cambiar la estructura nasal. En este sentido, la rinomodelación es una alternativa a la rinoplastia cuando se trata de correcciones menores, pero no puede sustituirla.